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La presente obra tiene por objeto un estudio de la nueva normativa de los procedimientos tributarios, con atención específica a los distintos aspectos de la posición jurídica en la que el nuevo texto legal sitúa a los contribuyentes. Resulta bien conocido que la Ley 58/2003, de 17 de diciembre, General Tributaria, ha hecho frente a una nueva ordenación y puesta al día de las instituciones centrales del ordenamiento tributario. En este sentido, la regulación sistemática de los cauces jurídicos para el desarrollo de las relaciones entre la Administración y los Contribuyentes se revelaba como uno de los retos inexcusables. La vieja LGT de 1963 contenía una regulación insuficiente, fruto de sucesivos remiendos llevados a cabo con la finalidad de adaptar su contenido a una realidad que desde muy pronto había quedado alejada de sus esquemas conceptuales originales. El sistema tributario vigente en la actualidad nada tiene que ver con el de cuarenta años atrás, a lo que debe añadirse que los institutos del procedimiento general que habían servido de referente al texto legal de 1963, han experimentado también hondas transformaciones en los últimos tiempos. En el indicado contexto, la nueva Ley ha tratado de dar respuesta, como se ha dicho, a las necesidades planteadas en el ámbito de los procedimientos tributarios. En opinión del autor de este estudio, el acierto en la consecución de dicho propósito ha sido desigual. La posición jurídica del contribuyente, no obstante, no parece salir en general bien parada a resultas del nuevo régimen legal. Un análisis Crítico de su contenido desde la perspectiva indicada podrá encontrar el lector en el interior del presente volumen
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