En las trincheras de Francia durante la Primera Guerra Mundial, bajo la lluvia constante de metralla, combatieron algunos españoles alistados como voluntarios. Lo hicieron como efectivos de la Legión Extranjera francesa, un cuerpo de élite integrado por hombres de numerosas nacionalidades. Estos españoles lucharon mientras en su país, a pesar de su neutralidad oficial, la guerra impactaba en diferentes esferas y la opinión intelectual se dividía entre aliadófilos y germanófilos. Los partidarios del triunfo de las fuerzas de la Entente pronto reconocieron la utilidad propagandística de aquellos voluntarios y los integraron en sus iniciativas y su retórica liberal y francófila, mientras desde Cataluña se les reivindicó como campeones de la causa de las nacionalidades. Esta obra explora, con la ayuda de fuentes inéditas de gran valor, quiénes eran aquellos soldados, qué les llevó a luchar en una guerra a la que no estaban llamados y como se les utilizó hasta desvanecerse en el olvido.