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Se cumple el primer cuarto de siglo de vigencia del Tribunal Constitucional y he querido dedicar este estudio monográfico a subrayar la importancia de este órgano constitucional, como intérprete auténtico de la Constitución.
El estudio se compone de dos partes. En la primera, destaco las funciones del Tribunal en los distintos procesos constitucionales. En la segunda, sintetizó algunos criterios relevantes de interpretación por la jurisprudencia constitucional de diversas valoraciones jurídicas sobre algunos temas planteados ante el Tribunal, resueltos con marcada exhaustividad e incidiendo en aspectos puntuales de nuestro Estado social y democrático de Derecho, como Estado constitucional. Como indicó Manuel García Pelayo, su primer Presidente, "la realización de las funciones del Estado no se tiene que desviar de las normas constitucionales que lo disciplinan, o, dicho de otro modo, en la máxima medida posible el ejercicio de cada función estatal ha de ser simultáneamente el legítimo ejercicio de una función constitucional.
El estudio del Tribunal Constitucional español permite concluir reconociendo que ha sentado una importante jurisprudencia constitucional como fuente del Derecho, así como la necesidad de una interpretación e integración de nuestra Norma Fundamental que, siguiendo el esquema de Hans Kelsen, sería el fundamento de nuestro Derecho.
La tendencia hacia la "plenitud integradora" del ordenamiento y el decisivo papel aclaratorio de las disposiciones constitucionales que ejerce el máximo órgano con jurisdicción suprema en el orden constitucional, nos ha llevado a perfilar, con ánimo de síntesis y en una labor continuada de reflexión sobre la jurisprudencia constitucional en estos veinticinco años, la singularización de los principios de mayor relevancia extraídos de la doctrina del Tribunal Constitucional, para destacar el carácter y significado de este órgano, básico en el Estado de Derecho.
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