Como respuesta a la tantas veces anunciada crisis de nuestra Seguridad Social, todas las fuerzas políticas asumieron la necesidad de una reforma integral del sistema mediante la firma del Pacto de Toledo en 1995. En lo que atañe a la pensión de jubilación, las sucesivas modificaciones han seguido una tendencia endurecedora de las condiciones de acceso y reductora de su intensidad protectora. La última vuelta de tuerca en este proceso ha sido plasmada en la Ley 27/2011 (parcialmente reformada por la Ley 3/2012), norma farragosa y compleja, y con períodos diferentes de entrada en vigor. En lo que hace referencia al régimen jurídico de la pensión, la Ley introduce dos cambios esenciales que inciden sobre la edad de acceso a la misma y al sistema de cálculo de su base reguladora. Estas y otras modificaciones relativas a cuestiones tales como la jubilación parcial, la anticipada o la compatibilidad entre trabajo y pensión, son objeto de análisis pormenorizado en la presente obra.