Una de las decisiones más importantes de la vigente Ley 29/1985, de 2 de agosto, de Aguas, fue la de configurar la planificación hidrológica como elemento imprescindible de la política hidráulica y hasta como parte del ordenamiento jurídico hídrico, complemento imprescindible de la legislación de aguas. La implementación de esta planificación hidrológica ha sido dificultosa, pero en el año 1998 ha tenido lugar la aprobación de los Planes Hidrológicos de Cuenca y en 1999 la aparición del Libro Blanco del Agua permite anticipar que, en el futuro, el Plan Hidrológico Nacional puede ser la adecuada culminación del proceso planificador.

Las Jornadas de Derecho del Agua que se celebran anualmente en la Universidad de Zaragoza se dedicaron, pues, a la consideración jurídica de los documentos indicados. El presente volumen reúne las ponencias y comunicaciones presentadas a dichas Jornadas