El objetivo de este libro es intentar poner de relieve la importancia que tiene en la obra de Keynes su familiaridad con los mercados financieros y de materias primas. La faceta inversora de Keynes no era marginal en su vida profesional, sino que en el período de entreguerras, que constituye la etapa fundamental de su carrera, cubrió una parte considerable de su jornada laboral. No ejerció, sin embargo, esta actividad en exclusiva, ni desde el punto de vista de la dedicación temporal, ni desde la perspectiva de su horizonte vital e intelectual, aunque influyera en sus otras tareas: la docencia universitaria, la labor periodística, y la preocupación por la situación económica y social. Entiende el autor que la familiaridad de Keynes con los mercados organizados deja huellas claras en sus escritos económicos, y constituye un factor importante en su visión de la economía. La pretensión del libro al considerar este aspecto es contribuir a una mejor comprensión de la obra y de las propuestas del gran economista inglés.