El vigente Código Penal ha sido precedido por una serie de intentos codificadores que, desde la instauración democrática en España, pretendían adecuar la legislación penal al marco legal de la Constitución de 1978. Sin embargo, tras varios intentos fallidos y con las importantes modificaciones de sendas reformas urgentes, no es hasta 1995 en que nace un nuevo CP. Particularmente, el Título XIII adopta una nueva denominación como "Delitos contra el patrimonio y contra el orden socioeconómico", dando lugar a dos subgrupos de infracciones delictivas que, pese a regularse bajo la misma rúbrica, no aparecen claramente diferenciados. Junto a los tradicionales delitos patrimoniales, el legislador penal tipifica e incrimina aquellas conductas merecedoras de sanción penal, caracterizadas por un contenido económico y por su trascendencia supraindividual. Con este trabajo se examinan los aspectos mas relevantes de los artículos 234 a 289, siguiendo la propia sistemática del nuevo texto punitivo; al tiempo se acompaña una selección jurisprudencial, así como de la doctrina emanada de las Audiencias Provinciales en cuestiones no contempladas por el TS, aportando al lector una prespectiva cercana al proceso penal.